Alcohólicos Anónimos

Marisol Muñoz-Kiehne, PhD

De niña vi la hermosa y poderosa transformación de mi mejor amiga y de su familia cuando su padre se comprometió a encarar su problema con la bebida participando en las juntas de Alcohólicos Anónimos (AA). Ahora de adulta, siempre que asisto a actividades de las fraternidades AA y que escucho a aquellos que se benefician de sus ofrecimientos, quedo impresionada e inspirada. Por esto en mi consultorio, en las clases para padres, en los medios de comunicación y en las conferencias y eventos en los que participo sugiero a los afectados por el alcoholismo y las adicciones que conozcan y consideren lo que ofrecen los programas de 12 pasos como es el internacionalmente conocido Alcohólicos Anónimos.

Cuerpos, Cerebros, Corazones, y Comunidades

No hay duda de que la dependencia o adicción al alcohol causa estragos en la salud y bienestar de nuestros cuerpos, cerebros, corazones, y comunidades. Como respuesta, Alcohólicos Anónimos…

  • Involucra al cuerpo, al sentar la expectativa de que la persona se presentará físicamente a las juntas.
  • Aborda al cerebro y al corazón mediante el estudio, el cual apela al pensar y al sentir humano a través de lecciones y testimonios reales.
  • Ofrece comunidad al propiciar el compartir entre personas, en lugares y situaciones en los que se convive y se celebra la vida en sobriedad.

Comprensión, Compasión, Compañerismo, y Camino

Gran parte del sufrimiento y de la angustia que agobia a los afectados por el alcoholismo se debe a la falta de comprensión y compasión que reciben de la sociedad en general, a la ausencia de compañeros comprometidos a la sobriedad, y a la desorientación generalizada precipitada por el beber fuera de control. Ante esto, Alcohólicos Anónimos…

  • Propone la comprensión del alcoholismo como una enfermedad seria, crónica y progresiva, y proclama la compasión hacia los infectados y afectados por éste.
  • Reconoce la importancia de la compañía y el compañerismo como antídotos ante el alcoholismo, por lo que llevan a cabo juntas a toda hora en todo el mundo, e implementan el sistema salvavidas de padrinazgo.
  • Brinda a los desorientados por el alcoholismo un camino con 12 pasos que conducen, si no a la cura, a la sanación y rehabilitación.

Atención, Aceptación, y Apreciación, en Anonimato

Quienes viven afectados por la enfermedad del alcoholismo a menudo son ignorados, rechazados, y menospreciados, tanto en contextos íntimos como públicos. Aún si el alcoholismo no se ha manifestado en conductas ilegales o antisociales, cuando la condición se hace pública la persona tiende a ser juzgada y condenada. Por lo contrario, en Alcohólicos Anónimos…

  • La persona alcohólica se identifica como digna de atención.
  • Se enseña a demostrar aceptación y apreciación de la persona alcohólica por comprometerse cada día a la sobriedad a pesar de su enfermedad.
  • El anonimato permite el desarrollo de la confianza entre los miembros, y el énfasis, no en las distinciones, sino en lo que tienen en común las personas afectadas por el alcoholismo.

Adelante con Aliento, Apoyo, Afecto

Según mis experiencias visitando y conversando con miembros de la fraternidad Alcohólicos Anónimos, gran parte de la popularidad y efectividad del programa AA se debe a que en sus actividades se ofrecen dosis regulares de la recomendada "Vitamina A:" Aliento y Ánimo, Apoyo y Ayuda, y refuerzos a tiempo de la poderosa "Vacuna A:" Afecto, Abrazos, y Amor.

¡Adelante, Amigos de Alcohólicos Anónimos!

Alcohol y Alcoholismo

El Alcohol viene como pasajero, nos visita como huésped, y se queda como amo.
— Confucio

Marisol Muñoz-Kiehne, PhD

El alcoholismo es una enfermedad seria caracterizada por el consumo desmedido de bebidas alcohólicas.  Aunque la vulnerabilidad a desarrollarlo es heredada, el alcoholismo nos impacta a todos.  Más allá del estereotipo del hombre borracho, el alcoholismo no distingue sexo o edad.

¿Mujeres y Adolescentes Bebedores?

Ya que muchas mujeres tienden a consumir bebidas alcohólicas en privado dadas las actitudes sociales negativas hacia la mujer bebedora, no es de conocimiento común el que la incidencia de abuso del alcohol y del alcoholismo femenino ha aumentado significativamente en las décadas recientes.

Tal vez usted sepa que el consumo de alcohol afecta más pronto y con menos cantidad a las mujeres que a los hombres, pero ¿sabía que los problemas médicos relacionados al alcoholismo progresan más rápidamente en las mujeres que en los hombres?  Y es un hecho que el alcohol tiene efectos dañinos en el bebé durante el embarazo. Cantidades moderadas de alcohol pueden precipitar abortos espontáneos y bajo peso al nacer, y cantidades mayores pueden causar síndrome alcohólico fetal, el cual conlleva trastornos físicos y mentales permanentes.

Muchas mujeres tienden a beber buscando alivio o escape de problemas en sus relaciones, presiones ocupacionales, y sentimientos de soledad.  Lejos de ayudar a resolver las dificultades, el tomar bebidas alcohólicas trae complicaciones que empeoran la situación tanto para la mujer como para sus seres queridos.  Similarmente, cuando se bebe en busca de levantar un ánimo deprimido, se agudiza la depresión original, ya que el alcohol actúa como depresor del sistema nervioso.

La ingestión de bebidas alcohólicas a menudo comienza en la adolescencia. Bajo la influencia del alcohol los jóvenes con frecuencia son víctimas de accidentes automovilísticos y se involucran en encuentros sexuales arriesgados.  Y cuando se empieza a consumir alcohol en la adolescencia, se corren riesgos mayores de que la experimentación se convierta en abuso y dependencia.

¿Uso, Abuso, o Dependencia?

Si bien la mayoría de los individuos pueden consumir bebidas alcohólicas moderadamente en situaciones sociales, algunos corren mayor riesgo de desarrollar patrones problemáticos de abuso y dependencia.

El abuso de alcohol se define como un patrón de consumo dañino para quien bebe o para otros.  Ejemplo de esto son cuando el tomar precipita lesiones o enfermedades, interfiere con el trabajo, los estudios, o la crianza de los hijos, o acarrea consecuencias legales, tales como el arresto por conducir bajo los efectos del alcohol.

La dependencia al alcohol, también llamada alcoholismo, es una enfermedad crónica y progresiva caracterizada por la urgencia intensa a beber, la pérdida del control sobre lo que se consume, la dependencia física, y el desarrollo de tolerancia al alcohol.

Algunas personas pueden beber socialmente sin incurrir patrones de abuso ni desarrollar dependencia, pero otras tienen una tendencia hereditaria al alcoholismo.  Ciertamente el ambiente en que la persona se desenvuelve también puede influenciar el consumo de alcohol. Aún así, en muchos casos la fuerza de voluntad y un ambiente saludables no son suficientes para que quien está predispuesto al alcoholismo permanezca sobrio.  Por esto se recomienda que las personas que padecen de alcoholismo se abstengan totalmente de tomar.  Aunque la enfermedad no es su culpa, es su responsabilidad manejarla.

Malas Noticias

El abuso y la adicción al alcohol acarrean problemas serios los cuales afectan a todo grupo social y a cada miembro de la familia.  Los niños son víctimas del alcoholismo aún cuando ellos mismos no estén tomando, o cuando creamos que son muy pequeños para ser afectados.  Cuando los adultos importantes en la vida de un niño tienen problemas con el alcohol, tanto el niño como sus relaciones presentes y futuras sufren.

Lamentablemente, nuestros niños están comenzando a consumir alcohol mucho antes de la edad legal (en Estados Unidos es ilegal tomar bebidas alcohólicas antes de los 21 años).  Se considera abuso infantil el ofrecer o administrar alcohol a menores de edad, ya que el alcohol interfiere con su desarrollo físico, mental, emocional y social.

El alcoholismo es precursor de cánceres, enfermedades del hígado y del cerebro, y anormalidades en el embarazo.  También aumenta las probabilidades de accidentes durante actividades laborales y recreativas, y al conducir un automóvil.  El costo económico y humano es incalculable, pues gran parte de los suicidios, homicidios, y otros actos violentos se cometen bajo la influencia de alcohol.

Buenas Noticias

El alcoholismo es una enfermedad tratable, y hay ayuda disponible para los afectados por la adicción al alcohol y sus consecuencias. Existe tratamiento médico (desintoxicación, medicinas) y sicológico (consejería individual, familiar y grupal) que puede procurarse en clínicas de salud y centros de salud mental y de tratamiento de adicciones. Los grupos de auto-ayuda, tales como los modelados según el programa de 12 pasos “Alcohólicos Anónimos,” ofrecen respaldo social y guía espiritual.

La solución se encuentra en buscar educación, información y orientación, para la prevención, la intervención, y la rehabilitación de esta dolorosa adicción.

Guías

  • Recordar que el alcoholismo es una enfermedad, no una debilidad moral
  • Identificar los síntomas del alcoholismo y enfrentarlo lo más pronto posible
  • Reconocer los factores ambientales de riesgo, tales como el historial de abuso infantil, la violencia familiar, la depresión, el estrés, la influencia de los compañeros, y la disponibilidad de la bebida
  • Reemplazar las relaciones, los lugares, y las situaciones asociados con el beber alcohol, por otros asociados con la sobriedad
  • Entender las recaídas y deslices como parte del proceso de rehabilitación
  • Desarrollar una red de apoyo entre familiares y amistades informados y dispuestos a ayudar
  • Buscar tratamiento profesional

Organizaciones

  • ACCESS Alameda (800) 491-9099, Contra Costa (800) 846-1652
  • Alcohólicos Anónimos www.aa.org, San Francisco (415) 554-8811, Marin (415) 774-4030, Santa Clara (408) 975-0826, (408) 295-0920, (408) 379-9375, San Mateo (650) 577-1310, (650) 342-2615, Sonoma (707) 829-1272, Alameda (510) 839-8900, Contra Costa (925) 939-4155, Napa (707) 255-4900, Solano (707) 643-8217
  • Alanon (para familiares y seres queridos de alcohólicos) y Alateen (para jóvenes afectados por el alcoholismo de seres queridos) (800) 344-2666, (510) 276-2270, (707) 575-6760, (925) 932-6770
  • Alcohol and Drug Abuse Council of Contra Costa County (925) 932-8100
  • Bay Area Community Resource (415) 444-5580
  • Casa Teresa (707) 573-0117
  • Center Point (415) 456-6655
  • Drug and Alcohol Resource Center (800) 879-2772
  • Gateway (800) 488-9919
  • Henry Ohloff Marin Outpatient Program (415) 451-3411
  • Latino Alcohol and Drug Prevention Program (415) 459-8974
  • Localizador de entidades para el tratamiento de sustancias (800) 662-9832
  • Marin County Drinking Driver Program (415) 453-9980
  • Marin County Department of Health and Human Services (415) 499-7175
  • Marin Services for Women (415) 924-5995
  • Marin Treatment Center (415) 457-3755
  • Mission Council on Alcohol Abuse for the Spanish Speaking (415) 826-6767
  • New Connections (925) 363-5000, (925) 439-7111
  • Orchid Women’s Recovery Center (510) 535-0611
  • Orenda Center (707) 565-7450
  • Substance Abuse Services (800) 662-4357
  • Substance Abuse Treatment Program (510) 536-4764
  • Ujima Family Recovery Services (510) 215-2280, (510) 236-3139, (925) 229-0230, (925) 427-9100
  • Uno a Uno (707) 565-7457
  • Youth Leadership Institute (415) 455-1676

Libros

  • Alcoholismo juvenil: Prevención y tratamiento (Roberto Secades Villa)
  • Alcoholismo: Preguntas y respuestas (Liz Hodgkinson)
  • Claves para criar un hijo libre de drogas (Carl Pickhardt)
  • Comportamiento humano y alcoholismo (Ricardo Castañón-Gómez)
  • Creciendo libre de drogas (Publicado por el Departamento de Educación de EU)
  • Cuando un adolescente toma drogas y alcohol: Qué hacer frente a la adicción de sus hijos (Dick Schaefer)
  • El alcoholismo en la juventud (Robert North y Richard Orange)
  • El alcoholismo es algo más que una enfermedad (José Baca)
  • Evitar las drogas (Patricia J. Murphy)
  • Jóvenes, sexo, y drogas: Las respuestas a tus preguntas (Reader's Digest)
  • Previniendo el uso de drogas entre niños y adolescentes: Una guía basada en investigaciones (Departamento de Salud de EEUU)
  • Te voy a contar una historia: La mía y la de mi hijo cuando fue atrapado por las drogas (Martha Alicia Chávez)

Sitios

  • al-anon.org/inicio  Sitio de la organización Al-Anon y Alateen, hermandad de parientes y amigos de alcohólicos que se reúnen en grupos de ayuda mutua.
  • aa.org Sitio general de la organización Alcohólicos Anónimos.
  • samhsa.gov/hable-ellos-escuchan Fuente de recursos bilingüe con artículos sobre cómo conversar con nuestros niños y jóvenes acerca del consumo de alcohol, tabaco y drogas.

Trauma y Niños

Marisol Muñoz-Kiehne, PhD

Desafortunadamente, muchos hemos experimentado sucesos tales como fuegos, terremotos, huracanes, accidentes, y encuentros con la violencia comunitaria y con el abuso de las autoridades.  

Actualmente en los EEUU existe un clima de temor en las familias inmigrantes, y los niños sufren al temer lo que puede sucederle a sus seres queridos.

Debemos estar preparados para manejar nuestras reacciones en tiempos difíciles para poder estar disponibles para nuestros niños, quienes cuentan con nosotros para protegerles y enseñarles a lidiar con sus propias reacciones.

Sugerencias

  • Esté al tanto de sus emociones, tome un minuto para calmarse, y responda a los niños de manera sensata y honesta.  Si está sobrecargado por sus emociones, encuentre a un adulto con quien hablar.
  • Usted tal vez tenga una expresión de preocupación en su rostro, o esté llorando.  En cuanto pueda, dirija su atención a lo que necesitan los niños.  Comunique calma y seguridad con su voz y con sus gestos.
  • Los niños quieren saber que están a salvo. Figure lo que les va a decir que los confortará.  Puede decirle, “Haré todo lo posible para protegerte.”
  • Hablen sobre la situación en cuestión, basados en el nivel de comprensión y la sensibilidad de cada niño.  Mantenga sus explicaciones simples.  Ofrezca información que clarifique los hechos.  Escuche lo que los niños se dicen entre sí.
  • Si los niños ven personas gritando, peleando o llorando y sienten temor, retírelos de la situación lo antes posible, afirme sus sentimientos, y hablen sobre lo que aconteció.
  • Siempre pregúntele a los niños lo que ya saben o creen.  Tal vez tengan que empezar la conversación corrigiendo información incorrecta.
  • Discuta con sus niños lo que hacen en casa y en la escuela para ayudarles a mantenerse a salvo.  Repase las rutinas de seguridad en casos de terremoto o fuego.  Enséñele a los niños un plan de emergencia, incluyendo que aprendan su nombre complete, su teléfono, y lugares seguros a donde ir en su hogar y en su vecindario.
  • Observe a sus niños jugar.  Algunos niños demostrarán en el Juego lo que les ha impactado. Usen arte, música o el escribir para expresar sus sentimientos.  Lean libros, salgan a caminar, y noten lo sano y hermoso en su entorno.
  • Enséñele a sus niños una escala del 0 al 10 en la que el 0 representa un día muy malo, y el 10 representa un día muy bueno.  De esta manera puede tener una idea de qué tal están pasando cada día.  Pregúnteles qué pueden hacer para hacer que su día suba de número.
  • Si su familia está lidiando con problemas serios o pérdidas, procure consejería.

Cuando ocurra un suceso difícil o traumático, trate de permanecer alerta, calmado, y respetuoso de los demás.  Sus niños le están observando, y aprenderán de sus actos aún más que de sus palabras.

Recurso

  • “Muy Malas Noticias” por Marisol Muñoz-Kiehne (www.centering.org)  

 

Timidez en la Niñez

Marisol Muñoz-Kiehne, PhD

La timidez en sí misma no es problemática o patológica, mas puede llegar a serlo cuando causa malestar o ansiedad excesiva, o cuando persiste a través del tiempo y de los contextos. La timidez también puede entorpecer el desarrollo infantil sano al interferir con las relaciones sociales y el desempeño académico.

Los niños tímidos tienden a ser ansiosos, pero pueden crecer felices y exitosos. Entendamos y atendamos a nuestros niños tímidos, para que así sea.

Características

  1. Les toma tiempo entrar en calor, desarrollar confianza.
  2. Se sienten inseguros y vulnerables, incómodos con personas y/o en lugares desconocidos.
  3. Tratan de evitar el hablar, y ciertas personas, lugares, o situaciones sociales.
  4. Tienen dificultades expresando sus pensamientos y sentimientos.
  5. No manifiestan sus talentos y potencialidades.
  6. Sufren achaques físicos relacionados al estrés.
  7. Prefieren estar solos y no toman la iniciativa para hacer amistades.
  8. Se apegan a sus adultos de confianza.
  9. Tienen concepto bajo de si mismos y son sensibles a la crítica.
  10. Sucumben ante la intimidación y se les dificulta pedir ayuda.

Causas

  1. La ansiedad ante la separación, etapa normal en el desarrollo infantil.
  2. La ansiedad hacia los desconocidos, fase transitoria en el desarrollo infantil.
  3. Predisposición genética a heredar la inclinación hacia la timidez.
  4. Diferencias temperamentales naturales.
  5. Conductas aprendidas por imitación mediante el ejemplo de modelos tímidos.
  6. Secuela del haber experimentado crítica y/o burla.
  7. Falta de experiencia practicando conductas alternas.
  8. Ambientes familiares de sobreprotección y aislamiento social.
  9. Respuesta al descuido, a la negligencia.
  10. Amenazas y disciplina severa generan inseguridad y timidez.

¿Qué Decir?

  1. Te amo y te acepto tal cual eres.
  2. Hay tiempo para todo: tiempo a solas, y tiempo en compañía.
  3. Voy a ayudarte a que te sientas más cómodo y sobreponerte a la timidez que te limita.
  4. Sé que es difícil para ti, y sé que puedes hacerlo.
  5. Aunque te sea incómodo, te sentirás mejor una vez lo hagas.

¿Qué Hacer?

  1. Responder a las conductas tímidas con paciencia, respeto, comprensión, y compasión.
  2. Prestar atención a lo que el niño hace y no hace, cuándo, dónde, y con quién.
  3. Exponer al niño gradualmente a personas y situaciones seguras.
  4. Acordar citas para jugar con niños de familias de confianza.
  5. Elogiar los comportamientos, esfuerzos, acercamientos, cambios, y logros.
  6. Enfatizar las capacidades y habilidades del niño, e inscribirle en clases relacionadas.
  7. Usar juegos para enseñar destrezas sociales.
  8. Dar al niño responsabilidades razonables a cumplir, y alentar, animar, ayudar, y apoyarle en la toma de decisiones.
  9. Coordinar con maestros y otros adultos que muestren atención y cariño al niño.
  10. Consultar consejeros o sicólogos y leer libros e información por Internet.

¿Qué Evitar?

  1. Llamar al niño “tímido,” o permitir que otras personas lo hagan.
  2. Ridiculizar o burlarse del niño, o permitir que otras personas lo hagan.
  3. Presionar al niño a la fuerza a enfrentar las situaciones angustiantes.
  4. Hablar por el niño.
  5. Comparar al niño con otros.

Si bien no son comunes las transformaciones drásticas de niños tímidos con temperamento introvertido a niños gregarios con personalidad extrovertida, los niños callados y reservados pueden llegar a sentirse seguros de sí mismos, más cómodos en situaciones sociales, más dispuestos a manifestarse, y florecer mostrando sus destrezas y talentos.

 

Temores Infantiles

Marisol Muñoz-Kiehne, PhD

El temor es la percepción de una amenaza, sea real o imaginada. Los miedos infantiles son parte normal y útil del crecimiento de los niños, ya que les conducen a tomar precauciones ante posibles peligros o evitar situaciones que puedan lastimarlos.

Todos hemos tenido y tenemos temores. De hecho, los temores de los niños a menudo reflejan los temores de los adultos a su alrededor.

Ciertos temores son comunes en las distintas etapas del desarrollo infantil. Los bebés reaccionan con miedo ante estímulos sensoriales intensos, tales como los sonidos fuertes. Cerca del primer año muestran miedo a personas y lugares desconocidos. Los niños pequeños a menudo exhiben miedo al abandono de sus padres, a la oscuridad, a los insectos o a otros animales, y a monstruos y otros seres imaginarios. Los preadolescentes y adolescentes temen a los accidentes, a las catástrofes naturales, a la muerte, y a ser lastimados, rechazados, o ridiculizados.

Hay miedos comunes que se disipan con el pasar del tiempo y sin mucha intervención, y hay miedos sintomáticos de otros problemas o trastornos que pueden requerir ayuda profesional. Las fobias son temores irracionales muy intensos y angustiantes que pueden incapacitar si limitan las actividades cotidianas del niño. Por ejemplo, las fobias a las situaciones sociales o a la escuela interfieren con el desenvolvimiento interpersonal y educacional del niño.

Las diferencias individuales también juegan un papel notable en los temores infantiles. Hay niños que son más temerosos o más osados dados su temperamento y personalidad. Además, los niños difieren entre sí en cuanto a cómo manifiestan sus temores. Si bien algunos niños admiten sentir miedo, otros no lo comunican con palabras sino al evitar las situaciones temidas.

Cuando entendemos y atendemos los miedos de nuestros niños, esto les ayudará a enfrentarlos y superarlos. He aquí unas 10 guías:

  1. Hablar sobre los temores, incluyendo los de nuestra niñez, y ofrecer explicaciones sencillas.
  2. Comunicar calma, control, cariño, consuelo, confianza, comprensión, y protección.
  3. Proteger sin sobreproteger, sirviendo de ejemplo al tomar precauciones y riesgos.
  4. Premiar los esfuerzos por enfrentar y superar los temores.
  5. Acompañar y alentar acercamientos a las situaciones temidas.
  6. Exponer al niño a lo temido poco a poco, progresivamente, de forma gradual.
  7. No obligar a enfrentar las experiencias temidas súbitamente.
  8. Evitar programas de TV, películas y juegos que despierten o agudicen temores.
  9. No burlar, ridiculizar, avergonzar, asustar a la hora de disciplinar, y aumentar los temores de los niños con los nuestros.
  10. Consultar pediatras o terapeutas si los temores son muchos, intensos, persistentes, interrumpen el desarrollo, o limitan la vida diaria del niño.

Recordemos que lo temido siempre es real para quien lo teme. Cuando nuestros niños se sientan asustados, atemorizados, aterrorizados o espantados, que nos sientan a su lado. Distingamos los temores comunes y simples de los temores sintomáticos. Y ayudémosles a enfrentar y superar sus miedos procurando ayuda si fuera necesario.

Salud Mental Infantil

Marisol Muñoz-Kiehne, PhD

El cerebro es parte del cuerpo.  También puede enfermarse.

(Tomado de un anuncio de la Alianza Nacional de Enfermedades Mentales)

Nuestras mentes, como nuestros cuerpos, se pueden enfermar y necesitar atención y tratamiento.  El diario vivir está lleno de dificultades que amenazan la salud mental infantil y juvenil; de hecho, hoy en día los niños y adolescentes crecen bajo grandes presiones.

Los temores, la tristeza, y el estrés son experiencias que constituyen parte de la vida.  Algunos individuos, grandes y chicos, también desarrollan trastornos de ansiedad, depresión y adicciones para los cuales existe ayuda sicológica efectiva. Las enfermedades mentales persistentes, tales como la esquizofrenia y el trastorno bipolar, son causadas por desequilibrios químicos en el sistema nervioso y requieren tratamiento médico.

La salud física, emocional, y social infantil y juvenil depende en gran medida de la salud mental.  Cuando los niños no están mentalmente sanos, sus cuerpos se enferman, sus relaciones sufren, y su capacidad de aprender se deteriora. Y cuando la salud mental de un miembro de la familia falla, especialmente si se trata de los padres o encargados de los niños, los pequeños pueden ser afectados significativamente.  Una de las mejores maneras de promover la salud mental infantil es atendiendo la salud mental de sus padres y encargados.

El estrés puede causar o empeorar enfermedades, y provocar problemas familiares, ocupacionales y sociales.  Las adicciones son destructivas a la salud y bienestar del directamente afectado y de sus seres queridos. La depresión es un trastorno emocional tan frecuente como incapacitante, y hasta puede llevar al suicidio.

Depresión Infantil y Juvenil

Lamentablemente, la depresión en niños y adolescentes es más común de lo que pensamos.  Sin embargo, a menudo no se detecta o trata temprano porque puede manifestarse de manera diferente a la típica en la adultez.

Síntomas

  • Tristeza o irritabilidad persistentes
  • Pérdida de interés en actividades favoritas
  • Falta de energía, agotamiento
  • Malestar, achaques y dolores
  • Cambios en el comer (tales como falta o aumento en el apetito)
  • Cambios en el dormir (inclusive insomnio, dormir demasiado, y pesadillas)
  • Deterioro en el desempeño académico
  • Dificultades en las relaciones con otros
  • Aislamiento
  • Problemas de concentración
  • Sentido de culpabilidad
  • Preocupación persistente
  • Desesperanza
  • Ideas autodestructivas (pensamientos sobre la muerte y el suicidio)
  • Actos autodestructivos (conductas arriesgadas, gestos e intentos suicidas)

Causas y Efectos

  • La depresión afecta a niños y a niñas, aún desde temprana edad.
  • Los episodios depresivos son precipitados por una combinación de factores.
  • Algunos factores bioquímicos son las predisposiciones heredadas (la depresión tiende a correr en familias) y los desequilibrios hormonales.
  • Algunos factores psicosociales son los problemas familiares, las presiones escolares, los conflictos sociales, y el haber sufrido pérdidas significativas.
  • Las repercusiones de la depresión impactan el aprovechamiento académico, las relaciones interpersonales, y el sentido de amor propio, hasta el punto de desear morir y hacer intentos suicidas.
  • En busca de alivio para el malestar de la depresión, a veces se recurre al alcohol y a las drogas, complicando aún más la situación.

Tratamientos

  • En California existen fuentes profesionales de salud mental para todo niño y joven, sin importar su situación migratoria.
  • Los sicólogos (licenciados con títulos de PhD o PsyD), terapistas de parejas y familias (con licencia MFT), y trabajadores sociales clínicos licenciados (siglas profesionales LCSW) ofrecen terapias y consejería individual, familiar, y grupal.
  • Los pediatras y siquiatras de niños y adolescentes, siendo médicos, pueden recetar medicinas.
  • El tratamiento puede tener lugar mientras el niño o adolescente vive en su hogar, o en hospitales o instituciones residenciales si necesitan intervención intensiva y supervisión profesional mientras se estabiliza su condición emocional.
  • Si el niño o joven tiene seguro Medi-Cal, califica para evaluación y tratamiento de salud mental gratuitos.  Los padres deben llamar a su oficina de Medi-Cal o preguntar en su clínica de salud.
  • En California, si el niño o joven tiene un plan individualizado de educación (IEP, por sus siglas en inglés), tiene derecho a asesoramiento y seguimiento gratuito por medio del programa AB3632.  Los padres de familia deben procurar orientación en su escuela o distrito escolar.
  • Los planes de seguro de salud incluyen beneficios de salud mental o siquiatría, los cuales se traducen en tratamientos sicológicos y médicos.  Los padres de familia deben informarse llamando a su representante.

Guías para fomentar la salud mental

  • Enseñar a los niños a reconocer y manejar sus emociones
  • Cultivar las buenas relaciones
  • Identificar y tratar las adicciones
  • Evitar las malas influencias y la violencia
  • Procurar apoyo mutuo y ayuda profesional
  • Hacer ejercicio diariamente
  • Comer alimentos sanos y con moderación
  • Evitar la nicotina, el alcohol, y las drogas ilícitas
  • Desarrollar cualidades de optimismo, sentido del humor, y flexibilidad
  • Tomar descansos frecuentemente, en lugares tranquilos y seguros
  • Aprender las siguientes técnicas simples, económicas, y efectivas:
  • Respirar profundamente desde el abdomen
  • Relajar los músculos (tensar y relajar grupos de músculos en secuencia)
  • Visualizar (incluyendo todos los sentidos, crear imágenes mentales positivas, de bienestar y éxito)
  • Meditar (calmar el cuerpo y la mente mientras nos concentramos en la respiración, o en una palabra, frase o imagen)
    • Practicar pasatiempos, pues son antídotos para los trastornos mentale
    • Tocar y escuchar música, bailar
    • Contemplar y crear obras de arte
    • Dedicar tiempo a labores relajantes (jardinería, manualidades, mecánica)
    • Leer y ver programas y películas con temas constructivos e inspiradores
    • Cambiar de ambiente saliendo a pasear frecuentemente

Organizaciones

  • ACCESS Salud Mental (888) 678-7277, (800) 491-9099
  • Alianza Nacional para los Enfermos Mentales. Asociación nacional con recursos y servicio de información y referencia. Tienen recursos en español. (800) 950-NAMI. www.nami.orgAsociación Nacional de la Salud Mental. (800) 969-6642. www.nmha.org
  • Línea para prevenir el suicidio: (800) SUICIDE, (800) 784-2433
  • Línea para familias con estrés:  (800) 829-3777
  • Línea de información y referidos en crisis: (800) 543-7283
  • Líneas para jóvenes: (800) 843-5200, (800) 637-0701, (800) 999-9999

Libros

  • Aspectos preventivos en salud mental (Gerald Caplan)
  • Cómo criar niños emocionalmente sanos: Satisfaciendo sus cinco necesidades vitales ¡y también las de los padres! (Gerald Newmark)
  • Guía práctica de la salud emocional (R. Calle)
  • La salud emocional de los niños (L. Shapiro)
  • La salud mental también se aprende (Marisol Fontecha Fresno)
  • Las múltiples caras de la depresión en niños y adolescentes: Revisiones en psiquiatría (David Shaffer y Bruce Waslick)
  • Nuestra salud mental (Roberto Federico)

Sitios

Centro de Apoyo Sitio de la Asociación Americana de Psicología, con información en español sobre temas relacionados a la salud mental y emocional.

aacap.org Sitio de la Academia Americana de Psiquiatría de Niños y Adolescentes. Tiene sección en español con hojas informativas sobre condiciones de salud mental que afectan a los niños y adolescentes.

espanolnami.org Sitio de la Alianza Nacional para los Enfermos Mentales. La sección en español contiene recursos, línea de ayuda, foros y grupos de discusión.

www.nmha.org Sitio de la Asociación Nacional de la Salud Mental.  Incluye hojas informativas en español.

Romanticismo en la Realidad

Marisol Muñoz-Kiehne, PhD

A muchos se nos hace difícil sacar tiempo para dormir, y más aún para cenas románticas o relaciones sexuales con su pareja. Aunque no sea fácil, el prestarle atención a las relaciones íntimas entre adultos es un regalo valioso para usted, para sus hijos si son padres de familia.

Ya que aproximadamente el 50% de los matrimonios terminan en divorcio, piensen seriamente sobre cómo pueden permanecer vinculados y enamorados. Muchas veces sentimos que el romance no tiene lugar cuando estamos cansados, estresados, o no nos sentimos atractivos.

Pregunta: Una madre de dos niños pequeños dice “Estoy exhausta y me preocupa que nunca tendré la energía para revivir el romance en mi matrimonio. ¿Tienen sugerencias para nosotros?"

Respuesta: He aquí algunas ideas que le han funcionado a otras parejas.

  • Hagan una cita y pónganla en su calendario con otros compromisos. Si no lo hacen, las responsabilidades del diario vivir y las necesidades de sus hijos desplazarán el tiempo a solas con su pareja.
  • Haga arreglos para encargar a sus hijos con familiares o amistades, para que pueda estar a solas con su pareja. Puede hacer esto durante el fin de semana por el día, cuando no sienta mucho cansancio. Una manera de hacer esto es encontrar a alguien con niños e intercambiar fines de semana cuidando los niños por unas horas. Tendrán cuidado infantil gratis dos veces al mes.
  • Envíele a su pareja mensajes telefónicos o electrónicos diciéndole cuánto le extraña, y que está anticipando verle.
  • Cuando estén juntos, dediquen tiempo a escucharse y conversar. No pasen todo el tiempo hablando sobre los niños o sobre el auto descompuesto.
  • Si no se siente con deseos de actividad sexual, traten darse masajes de la espalda o sobos en los pies. Muchas veces lo que se desea es el contacto íntimo, no el sexo.
  • Cuídese a sí mismo para propiciar deseos románticos. Piense sobre lo que le hace sentir bien, y ponga como prioridad sacar tiempo para dormir, ejercitarse, o conseguir un ajuar especial.
  • Bese a su pareja cuando se encuentren, aún tras un día de trabajo. Recuerde reconocerle positivamente, por ejemplo diciéndole, “Cielo, gracias por una cena tan deliciosa.”

La salud emocional de su pareja y familia depende en parte de cómo usted balancea sus necesidades con las necesidades de sus hijos. Mejorar la vida romántica de la pareja les hace bien a todos.

El Día del Amor y la Amistad es un buen día para decir “Te amo,” pero su pareja agradecerá su atención amorosa durante todo el año.

 

Propósitos Productivos

Marisol Muñoz-Kiehne, PhD

“De ahora en adelante…” “Nunca más…” Muchos aprovechamos el principio de año para declarar nuestras intenciones sobre lo que deseamos cambiar o mejorar en nuestras vidas. Hacemos propósitos de empezar hábitos constructivos, y terminar los destructivos. Fijamos metas a corto y a largo plazo, y trazamos planes dirigidos al alcance de estas metas. Pensando en nuestro bienestar, y en el de nuestros niños y familias, hacemos promesas, con la mejor intención de cumplirlas. Mas son pocos los que logran mantener las llamadas resoluciones de año nuevo. “El infierno está lleno de buenas intenciones.”

“Lo que mucho vale, mucho cuesta.” No es nada fácil hacer cambios. El desarrollo de un hábito conlleva un mínimo de 21 días consecutivos. Toma un promedio de siete intentos serios el poder dejar un hábito establecido. Cuando de adicciones se trata, es aún más difícil.

“Sí se puede.” Con determinación, persistencia, apoyo, y ayuda profesional como impulso cuando sea pertinente, podemos convertir nuestras intenciones en acciones, y alcanzar nuestras metas.

“Lo prometido es deuda.” Tomemos conciencia de lo que deseamos cambiar, y decidamos comprometernos a resoluciones positivas como las siguientes.

Para la Salud Física

  • Más frutas y verduras
  • Menos comida chatarra
  • Ejercicio diario
  • Suficiente descanso
  • Reducir o eliminar alcohol, cigarro, y otras sustancias dañinas

Para el Funcionamiento Mental

  • Leer a diario
  • Practicar idiomas
  • Practicar destrezas artísticas, musicales, atléticas, técnicas, mecánicas
  • Visitar lugares educativos (bibliotecas, museos, teatros, naturaleza)
  • Reducir actividades pasivas (televisión)

Para el Bienestar Emocional

  • Expresar afecto diariamente
  • Dedicarle a cada niño tiempo especial regularmente
  • Pasar tiempo divertido con la familia regularmente
  • Reducir la desorganización en el hogar
  • Eliminar los comportamientos abusivos y la violencia

“El que mucho abarca, poco aprieta.” Comenzar emprendiendo pocos cambios simultáneamente, e ir aumentando según los nuevos hábitos se vayan cimentando.

“Las palabras se las lleva el viento.” Es importante tomar acción. Decidir tomar medidas específicas y realistas que podamos llevar a cabo regularmente, integradas a nuestro diario vivir. Sentar metas diarias, semanales, mensuales, según sea apropiado.

Identificar las circunstancias que facilitan e impulsan y las que obstaculizan o impiden el mantenernos fiel a nuestras intenciones. Aumentar la presencia de los factores facilitadores, y evitar las personas, lugares y situaciones que interfieren con nuestros propósitos.

“La fe mueve montañas.” Buscar inspiración y ánimo, para fortalecer la determinación. Mantener la meta en la mirilla y conservar una actitud optimista. Celebrar cuando nos comportamos de acuerdo a nuestros propósitos, y las aproximaciones a nuestras metas.

“Paso a paso, se llega lejos.” La persistencia paga. Habrá obstáculos, deslices, y recaídas. Lo crucial es coger impulso, y volver a emprender la marcha. “Para atrás, ni para coger impulso.”

 

Perspectivas Positivas

Marisol Muñoz-Kiehne, PhD

Todos los días traen buenas y malas noticias a nivel personal, familiar, local, nacional, y mundial.  Cuando enfocamos nuestra atención principal o exclusivamente en las dificultades, las tragedias y la adversidad, es como cuando vemos el vaso que está lleno hasta la mitad como medio vacío.  Podemos percibir el mismo vaso como medio lleno al reconocer los eventos y las posibilidades favorables que nos ofrece cada día.  

Las perspectivas pesimistas producen impotencia, depresión, y parálisis; las perspectivas optimistas nos hacen sentir capaces de tomar acción para lidiar con los problemas.  Propongámonos asumir puntos de vistas positivos, y sirvámosles de ejemplo a nuestros niños, para que aprendan a reconocer que si bien la vida presenta malas noticias y problemas, también ofrece buenas noticias y oportunidades.

Guías

  • Vivir un día a la vez- “me concentro en el presente”
  • Recordar que todo pasa- “no hay mal que dure cien años”
  • Aceptar lo que no podemos cambiar y actuar sobre lo que podemos influenciar- “si tu mal no tiene cura, ¿por qué te apuras?  y si la tiene, ¿por qué te apuras?”
  • Diferenciar entre necesidades y preferencias- “¿lo necesito, o lo deseo?”
  • Perdonarnos y tenernos paciencia- “soy humano”
  • Pensar con flexibilidad y creatividad- “será de otra manera”
  • Motivarnos y felicitarnos por nuestros esfuerzos- “¡ánimo, adelante!”
  • En lugar de fracaso, negatividad y peligros, aprovechar las lecciones- “¿qué puedo aprender de esta situación?,” “quizás salga algo bueno de todo esto”
  • Buscar el humor, lo irónico o absurdo en la situación, y sonreír frecuentemente- “a mal tiempo, buena cara”
  • Prepararnos para lo peor (por si acaso), pero esperar lo mejor
  • Contar y compartir nuestras bendiciones- “las cosas pudieran ser mucho peor”
  • Mantener la fe- “¡que no muera la esperanza!”
  • Reemplazar mensajes negativos por positivos- “¡sí se puede!”

Libros

  • Muy Malas Noticias/Big Bad News (Marisol Muñoz-Kiehne)
  • Sopa de Pollo para el Alma de los Niños: Relatos de valor, esperanza y alegría (Jack Canfield, Mark Victor Hansen, Hansen Patty, Dunlap Irene)
  • Sopa de Pollo para el Alma del Adolescente: Relatos sobre la vida, el amor y el aprendizaje (Jack Canfield, Mark Victor Hansen, Kimberly Kirberger)
  • Sopa de Pollo para el Alma de los Padres : Relatos sobre el amor, el aprendizaje y la condición de los padres (Jack Canfield, Mark Victor Hansen, Kimberly Kirberger, Raymond Aaron)

Mutismo Selectivo

Marisol Muñoz-Kiehne, PhD

Tal vez porque he mencionado en la radio que de niña padecí de mutismo selectivo, a menudo recibo llamadas, mensajes, y visitas en mi consulta de padres y maestros, preguntando preocupados qué hacer para entender y ayudar a los niños quienes, siendo capaces de hablar en casa, no se atreven a hablar en lugares públicos, inclusive la escuela.

El mutismo selectivo se considera un trastorno sicológico/siquiátrico usualmente evidente en la niñez, el cual puede producir no sólo angustia en los niños que lo manifiestan, sino que puede interrumpir su desarrollo social y su progreso escolar. Por esto amerita entender el fenómeno, para prevenirlo o abordarlo y resolverlo, mientras antes, mejor.

¿Qué lo Antecede?

En gran parte de los casos de mutismo selectivos se encuentran presentes uno o más de los siguientes factores:

  1. Disturbios del habla, tales como errores de articulación y pronunciación.
  2. Problemas del lenguaje, comunes en niños que están aprendiendo más de un idioma.
  3. Percepción de no tener poder personal; el silencio se interpreta como una manera de ejercer control sobre otras personas en su entorno inmediato.
  4. Historial de haber presenciado o experimentado sucesos traumáticos que producen un retroceso en el desarrollo infantil (por ejemplo, presenciar violencia familiar o ser víctima de abuso físico, emocional o sexual).
  5. Cambios y transiciones estresantes, como lo es el comienzo de la escuela en niños que no están preparados emocional o socialmente.

¿Qué no Ayuda?

A veces con las mejores intenciones los adultos se equivocan al tratar de hacer hablar a los niños al:

  1. Ignorar el silencio del niño, pretender que es normal que el niño no hable fuera de casa.
  2. Comparar al niño con otros niños que no manifiestan mutismo selectivo.
  3. Amenazar o maltratar al niño por no hablar.
  4. Ridiculizar al niño o burlarse de su silencio.
  5. Chantajear al niño para que hablen.

¿Qué Ayuda?

Para que los niños que se sienten más seguros en silencio comuniquen sus necesidades, deseos y experiencias con palabras, ayudan los siguientes acercamientos:

  1. Unirse al niño en las maneras que éste use para expresarse, y así desarrollar o reforzar la conexión cómoda y estrecha con él.
  2. Animar al niño de formas gentiles y juguetonas a que hable mientras se le expone gradualmente a situaciones en las que por lo general no habla.
  3. Enseñar al niño el lenguaje de señas, y pedirle que se comunique con éste cuando no hable.
  4. Fomentar la sensación de seguridad en los entornos en los que se desenvuelve el niño, no tolerando la burla, la intimidación, o el maltrato.
  5. Demostrar confianza y esperanza al niño en su habilidad de usar su voz para comunicarse, aún cuando se le haga incómodo inicialmente.

Para los niños cuyo mutismo selectivo tiene orígenes específicos, modalidades e intervenciones terapéuticas particulares son pertinentes, incluyendo aquellas que tratan los trastornos de habla y de lenguaje, y los trastornos de ansiedad, inclusive el trastorno de ansiedad debido a sucesos traumáticos.

Si bien el mutismo selectivo puede ser angustiante para el niño y para sus padres y educadores, cuando se interviene temprano y consistentemente se logra la recuperación total.

Cuando yo era niña, otros niños se reían de mí en el autobús escolar y en la escuela, llamándome "Conversación" porque no me oían hablar. ¡Si supieran ahora que dedico la mayor parte de mi tiempo hablando en sicoterapia, enseñando, en tarimas y ante micrófonos, usando mi voz para conversar!

Manejo del Tiempo

Marisol Muñoz-Kiehne, PhD

El tiempo es uno de los recursos más valiosos con el que contamos todos, chicos y grandes, ricos y pobres. Muchos refranes populares se refieren al tiempo y a cómo manejarlo: “hay que darle tiempo al tiempo,” “a su tiempo maduran las uvas,” “el tiempo todo lo cura,” “más vale tarde que nunca,” “nunca es tarde si la dicha es buena,” “no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy,” “No por mucho madrugar amanece más temprano,” “vísteme despacio, que voy de prisa…”

Cuando del manejo del tiempo se trata, la vida moderna es un acto de malabarismo. Sin haber tenido el adiestramiento que tienen los profesionales del circo, intentamos mantener en el aire innumerables tareas importantes, ¡y parece que a veces nos aceleran la música!

La crianza de los hijos en sí misma conlleva múltiples tareas interminables. ¿Conoce algún padre de familia a quien le sobre tiempo? Si bien no podemos extender las horas del día ni los días de la semana, podemos administrar mejor el tiempo del que disponemos. Recordando que los niños aprenden de nosotros cómo manejar el tiempo, sigamos las siguientes guías para aprovecharlo mejor, y así apreciar y disfrutar cada día.

Guías

  1. Planificar con anticipación estimando cuánto tiempo requieren las tareas.
  2. Anticipar cambios y alistarnos para éstos.
  3. Prepararnos para las horas del día o las temporadas más ocupadas.
  4. Ser realistas al programar el día y la semana.
  5. No postergar- No permitir que las tareas crezcan o se acumulen.
  6. Organizarnos- hacer listas realistas, usar calendarios y libros de citas, dejar tiempo para lo inesperado, no comprometernos de más.
  7. Ordenar y simplificar el hogar y el área de trabajo para encontrar las cosas mejor.
  8. Dividir tareas grandes en pedazos manejables.
  9. Establecer prioridades- primero lo primero, sea lo más importante o lo más urgente.
  10. Ser eficientes- hacer tareas simultáneamente, cocinar bastante y congelarlo para luego, alistar la ropa para la semana.
  11. Agrupar las tareas- llamadas telefónicas, pago de cuentas, compras y mandados.
  12. Delegar- asignar tareas a otros, inclusive a los niños.
  13. Decir “No” a las interrupciones no bienvenidas y a las responsabilidades opcionales no deseadas.
  14. Levantarse temprano, para no estar con prisa.
  15. Preparar por la noche la ropa, comida, y materiales de mañana.
  16. Dar mantenimiento, reemplazar o componer el auto y otros aparatos.
  17. Permitir tiempo de sobra para citas- traer libro, tareas, o pasatiempo para cuando hay que esperar.
  18. Tener un plan alternativo (“Plan B,”) por si el plan original (“Plan A”) no funciona.
  19. Tomar descansos para “cargar las baterías.”
  20. Usar el fin de semana para un cambio de rutina

Administrar efectivamente el tiempo no es fácil, mas ¡Sí se puede!

 

Inteligencia Emocional

Marisol Muñoz-Kiehne, PhD

Inteligencia infantil: Razón y pensamiento, emoción y sentimiento

¿Son inteligentes sus hijos?  Parece ser una pregunta simple, pero refleja un fenómeno complejo, ya que la inteligencia incluye una variedad de dimensiones y manifestaciones.

Lo que comúnmente se considera inteligencia se refiere a las habilidades del pensamiento racional, cognitivo, capacidades como la memoria y la aptitud matemática, que ayudan a los niños en su desempeño académico.  Esta inteligencia es en gran medida heredada, y aunque se puede desarrollar hasta cierto punto, como dice el refrán “no le pidas peras al olmo.”

Por otro lado, la llamada inteligencia emocional, popularizada por los escritos y estudios del profesor de la Universidad de Harvard Dr. Daniel Goleman, concierne a las habilidades involucradas en el comprender los sentimientos propios y ajenos, y aplicar este conocimiento al comportamiento.  Sea cual sea su inteligencia racional, la inteligencia emocional de todos los niños puede cultivarse constantemente y crecer a través de la vida.

Importancia e implicaciones: Más vale 1 año de adversidad, que 10 de universidad

¿Quiere que sus hijos sean genios, o congeniales?  Todos deseamos que nuestros hijos sean inteligentes, pues pensamos que la inteligencia facilita la felicidad y el éxito en la vida.  Esto es acertado en algunos sentidos, y en otros sentidos equivocado.  Las personas más brillantes no se sienten como las más afortunadas ni resultan ser las más triunfadoras.  Las investigaciones científicas al respecto señalan que el bienestar personal y ocupacional parece depender más del cociente emocional que del coeficiente intelectual.  Quienes muestran mejores destrezas para manejar sus emociones y relacionarse con los demás son quienes viven más dichosos y satisfechos, responden mejor ante la adversidad, y se destacan como más populares y productivos a lo largo de sus vidas.

La inteligencia emocional de sus hijos puede estimularse y fortalecerse mediante experiencias y actividades durante su niñez y adolescencia, ya que su cerebro en desarrollo cambia según la interacción de los niños con su entorno.  Para esto es crucial que los padres de familia se conecten con las emociones de sus hijos desde pequeños.  Es de sus padres que típicamente los niños aprenden sobre sí mismos, sobre los demás, y acerca del mundo en el que viven.  Es en el hogar que se enseña a reconocer, manejar, y expresar la gama de emociones que experimentamos los seres humanos.  Y es en casa que los niños se socializan a la convivencia con otros.

Ya que la inteligencia emocional se desarrolla mediante la observación, la imitación, la instrucción, y la aplicación, corresponde a los padres de familia servir de ejemplos, y ejercer como educadores y entrenadores.  Si sus hijos ven que usted conoce, maneja, expresa y canaliza sus propias emociones de maneras sanas, ellos tendrán modelos inteligentes a seguir.  Al enseñarles a comunicarse, compartir y comportarse en convivencia en la familia, les preparas a desenvolverse congenial y eficazmente en otras relaciones y en otros grupos.

Ingredientes indispensables: Principios y ejercicios para la inteligencia emocional

  1. Observe y escuche a cada uno de sus hijos con atención plena
  2. Demuéstrele a sus hijos que sus sentimientos son importantes
  3. Háblele a sus hijos sobre las emociones: dicha, temor, enojo, tristeza, etc
  4. Permita que sus hijos expresen de forma segura sus emociones intensas
  5. Cree un ambiente familiar comprensivo, cómodo, abierto al diálogo
  6. Demuéstrele a sus hijos respeto, comprensión, y aceptación
  7. Juege al reconocimiento de emociones en personajes de cuentos, libros, y TV
  8. Preséntele a sus hijos dibujos representativos de las emociones principales y nómbrenlas
  9. Propicie que sus hijos hagan amistades, para practicar la convivencia con compañeros
  10. Recuerde darle a sus hijos su dosis diaria de “Vitamina A”: Afecto, Aliento, Apoyo

Indicadores ilustrativos: Elementos y ejemplos de inteligencia emocional

  1. Reconocer las emociones propias- sean placenteras o no: “Conócete a ti mismo”
  2. Tolerar las emociones desagradables- propias y de los demás: “Todos sentimos enojo, estrés, tristeza, temor…”
  3. Nombrar las emociones-  ponga etiquetas, llame a las cosas por su nombre: “Al pan, pan, y al vino, vino”
  4. Manejar las emociones sanamente- enseñe a sus hijos qué decir y hacer para expresar los sentimientos sin violencia, pues “nadie nace sabiendo”
  5. Controlar los impulsos- ofrézcale a sus hijos consejos concretos: “Cuando me enojo y siento deseos de romper algo, me retiro para calmarme”
  6. Comunicar las experiencias claramente - aclare la confusión, para ayudar la comunicación y afirmar la relación:  “Me siento estresada, no estoy enojada contigo”
  7. Demostrar empatía y compasión- capte los sentimientos y necesidades de otros y póngase en su lugar; enseñe a sus hijos a “ponerse en los zapatos del otro”
  8. Persistir ante los contratiempos- ante las dificultades, anímese y aprenda en pos de sus propósitos: “El que persevera, alcanza”
  9. Mostrar solidaridad ante la adversidad- dígale a sus hijos que cuenten con usted “en las verdes y en las maduras”
  10. Reflejar optimismo- comuníquele esperanza a sus hijos...  a pesar de los pesares, “¡Sí se puede!”

Interferencia e interruptores: Barreras y bloqueos a la inteligencia emocional

A pesar de sus mejores intenciones, inevitablemente flaqueará y fallará al impartir y compartir las lecciones de la inteligencia emocional con sus hijos.  Póngase en alerta a los errores más comunes que cometemos los adultos al criar y educar niños emocionalmente inteligentes.

  1. Ignorar los sentimientos de los niños- no tomar en cuenta, o actuar como si no notáramos las manifestaciones de sus emociones: “No le hagas caso cuando llora”
  2. Menospreciar las emociones de los niños- subestimar el valor y el impacto de sus sentimientos en su vida y relaciones:  “Es muy chiquito, se le va a pasar el miedo y ni se acordará”
  3. Minimizar los problemas de los niños- reducir la importancia de las dificultades y desafíos que se les presentan: “¿Por qué te pones así por esa tontería?”
  4. Castigar a los niños por sentir emociones- regañarlos, criticarlos, o implementar consecuencias punitivas por tener sentimientos negativos o intensos: “¡Eso te pasa por enojarte!”
  5. Interrumpir a los niños cuando expresan sus experiencias- desperdiciar oportunidades de ayudarles a entender sus emociones y las situaciones que las precipitan:  “Deja ya de hablar de eso, para que se te olvide”

Inspiración e ideas: Recordatorios y recursos

Recordemos que desde bebés los niños sienten confusión, desesperación, frustración, y desilusión. Como adultos, es nuestra función y obligación usar la razón, y la emoción, la comunicación, la intención, y la acción. Así que ofrezcámosles atención, observación, protección, estimulación, instrucción, conversación, consolación, ¡y comprensión!

Libros para adultos

  1. Inteligencia Emocional (Dr. Daniel Goleman)
  2. Inteligencia Emocional para Padres (Claudia Sandino)
  3. Inteligencia Emocional en los Niños (Dr. Lawrence Shapiro)
  4. Despierta la Inteligencia Emocional en los Niños (Annie Rehbein de Acevedo)
  5. Educar con Inteligencia Emocional (Maurice J. Elias, Steven E. Tobias y Brian S. Friedlander)

Libros para niños

  1. Cuentos para Sentir (Begoña Ibarrola)
  2. Hoy me Siento Tonta y Otros Estados de Ánimo (Jamie Lee Curtis)
  3. Vege Tal como Eres (Joost Elffers & Saxton Freymann)

 

Estrés: Señales y Soluciones

Marisol Muñoz-Kiehne, PhD y Rona Renner, RN

¿Tiene días en los que hay demasiado por hacer? Tal vez no se detiene a comer, se siente irritable y le grita a los niños por cualquier cosa. Puede ser que esté experimentando estrés. Si es así, no se encuentra solo.Todos nos hemos sentido estresados, y sabemos cómo se siente cuando hay demasiadas presiones de parte del trabajo, la escuela, los familiares, u otras circunstancias de la vida.

El estrés es una reacción natural a presiones físicas y emocionales. Es una manera en la que respondemos a los cambios y desafíos que enfrentamos, sean nuevas tareas en el trabajo o problemas interpersonales.

El estrés puede causar síntomas físicos, tales cómo dolores de cabeza y de estómago, y alta presión arterial. También está asociado a la ansiedad, a la depresión, a problemas al dormir, al enojo y a la agresión.

Podemos responder al estrés bebiendo, fumando, comiendo de más, o usando drogas. Estas maneras de manejar el estrés tienen consecuencias negativas.

Las siguientes son maneras saludables de lidiar con el estrés, las cuales pueden hacer una gran diferencia para usted y su familia:

  • Revise su itinerario. Si está haciendo demasiado, decida qué tiene más importancia para usted y su familia, y elimine otras actividades. Planifique ratitos de descanso.
  • Descanse y duerma lo suficiente. El dormir nos ayuda a mantenernos saludables y con energías. La recomendación general es que los adultos duerman ocho horas cada noche, mas las necesidades individuales varían.
  • Descubra maneras de relajarse, tales como salir a caminar, leer, escuchar música, o darse un baño. Si se encuentra trabajando, intente lo siguiente por 5 minutos: siéntese, cierre los ojos, tome varias respiraciones profundas, relaje las partes de su cuerpo que se sientan tensas, tales como el cuello y los hombros. Piense en personas, cosas o lugares que le hacen sentir cómodo y contento.
  • Haga ejercicio regularmente. Puede caminar, practicar jardinería, montar bicicleta, jugar deportes o bailar con sus niños.
  • Coma bien, tres veces al día. Si nota que tiende a comer más cuando siente estrés, evite la comida chatarra y escoja alternativas sanas.
  • Haga listas y ponga sus deberes en orden de prioridad. Trate de cumplir con alguna tarea cada día. Use calendarios y libros de citas para que le ayuden a organizarse.
  • Escriba sus sentimientos en un diario, dibuje o pinte para explorar aquello con lo que esté lidiando, y expresar sus emociones.
  • Procure ayuda de familiares, amistades, o profesionales. Asista a clases sobre el manejo del estrés o la crianza de los niños, participe en consejería o terapia, o hable con su médico o líder religioso.

El estrés es parte de la vida. ¡Reconózcalo, redúzcalo, y relájese!

Estrés: Planificación y Organización

Marisol Muñoz-Kiehne, PhD

La planificación y la organización pueden disminuir nuestros niveles de estrés al reducir sus fuentes, y al ayudarnos a abordar las experiencias de estrés que son inevitables.  

He aquí unas guías para abordar el estrés personal, familiar y laboral planificando y organizándonos.

Planificación para la Prevención y la Preparación

  • Planificar para usar el tiempo y la energía eficientemente
  • Evitar muchos cambios simultáneos
  • Prepararse para o anticipar cambios
  • Prepararse para horas del día o temporadas que traen más estrés
  • Permitir tiempo de sobra para lo inesperado
  • Practicar y visualizar un evento anticipado que produce estrés
  • Hacer lo desagradable o difícil antes de lo agradable o fácil
  • Simplificar nuestras rutinas lo más posible
  • Ser realistas al programar nuestro día y nuestra semana
  • Estimar cuánto tiempo requieren las tareas
  • Permitir tiempo de sobra para citas
  • Traer libro, tareas, o pasatiempo para tiempos de espera
  • Decir “No” a responsabilidades opcionales
  • No comprometernos de más
  • No permitir que los problemas crezcan o se acumulen
  • No postergar, evitar dejar para mañana lo que podemos hacer hoy
  • Tener un plan alternativo (“Plan B,”) por si el plan original (“Plan A”) no funciona

Organización Exterior e Interior

  • Hacer listas realistas
  • Usar calendarios y libros de citas
  • Organizar el hogar y el área de trabajo
  • Dividir tareas grandes en pedazos manejables
  • Establecer prioridades- primero lo primero
  • Eficiencia- realizar varias tareas simultáneamente
  • Delegar- asignar tareas a otros
  • Levantarse más temprano
  • Preparar la ropa para la semana
  • Preparar ropa, comida, materiales de mañana la noche anterior
  • Cocinar bastante y congelarlo para la semana
  • Agrupar los mandados y compras
  • Agrupar tareas tales como llamadas telefónicas, pago de cuentas
  • Llenar el tanque de gasolina mientras todavía quede un cuarto
  • Reemplazar o componer lo que no funciona
  • Hacer copias de llaves y tenerlas disponibles

Estrés Familiar y Niños

Marisol Muñoz-Kiehne, PhD

¿Sabía usted que los niños perciben el estrés de los padres desde antes de nacer? Se ha demostrado que los fetos responden alterados cuando la madre siente estrés.

Aún cuando no luzcan conscientes porque sean pequeños, estén dormidos, o se encuentren fuera de la habitación donde estemos, los niños reconocen cambios en el estado anímico de sus padres, desde pequeñitos.

Aunque los bebés no entiendan ni se expresen con palabras, reaccionan por medios no verbales. Antes del desarrollo verbal ya perciben y responden a las emociones.

Cuando los bebés sienten las tensiones en su entorno, se altera su sentido de seguridad, y se enciende una alarma de peligro, como si enfrentara una situación amenazante. Los bebés tienden a reaccionar con comportamientos tales como notarse demasiado alerta a los sonidos y movimientos, y llorar más. También tienden a mostrar síntomas físicos, tales como alteraciones en el sueño (dificultades al dormir), el apetito (comer más o menos, con más o menos frecuencia), y la eliminación (cambios o problemas al orinar y evacuar).

Cuando los niños hablan, ya comprenden y pueden expresarse usando palabras. Si a los bebés los confortamos principalmente arrullándolos y acariciándolos, a los mayorcitos además debemos explicarle con palabras, según su nivel de entendimiento, lo que sucede y lo que vamos a hacer al respecto, para reducir los temores y disminuir su estrés.

Las tensiones y conflictos en la relación de los padres, desde las discusiones cotidianas hasta la violencia doméstica, son de las principales y potencialmente más dañinas fuentes de estrés en los niños.

Es importantísimo servir de buen ejemplo a los niños de cómo resolver nuestros desacuerdos, de cómo reconocer las señales de nuestro estrés, y manejarlo. Es crucial proteger a los niños de las preocupaciones y problemas de los adultos.

Los niños tienen menos control sobre su persona y sobre su entorno que los adultos; viven a la merced de sus emociones y de los adultos en sus vidas. Algunos niños son más afectados que otros por el estrés de sus padres, debido a diferencias en temperamento que les hagan más o menos sensitivos, y dependiendo de cómo manejan los padres el estrés.

A los niños quienes son más estresados por naturaleza, debemos ofrecerles comprensión, compasión, e intervención. Debemos demostrarles que entendemos que son sensitivos a las tensiones ambientales, que queremos evitarles sufrimientos innecesarios, y que les ayudaremos a prepararse y a aprender a lidiar con las situaciones estresantes que les presentará la vida, con ayuda profesional si fuera necesario.

Recomendaciones

  1. Minimizar, prevenir, o anticipar situaciones estresantes cuando posible
  2. Estar alerta y responder a las señales y manifestaciones de estrés
  3. Prepararse para horas del día o temporadas que traen más estrés
  4. No postergar ni permitir que los problemas crezcan o se acumulen
  5. Buena alimentación, ejercicio diario y suficiente descanso
  6. Practicar técnicas de respiración, relajación, y visualización
  7. Hacer listas realistas, usar calendarios y libros de citas
  8. Organizar hogar y área de trabajo para encontrar las cosas mejor
  9. Escuchar, tocar música, bailar, apreciar y hacer arte
  10. Observar o practicar deportes y pasatiempos
  11. Buena selección de lectura, películas y programas
  12. Consejería o terapia individual, familiar o grupal

 

Estrés en Navidades

Marisol Muñoz-Kiehne, PhD y Rona Renner, RN

Muchas personas sienten que su nivel de estrés aumenta durante la temporada festiva al trabajar para tener suficiente dinero, prepararse para las tradiciones familiares, y proveer a los niños actividades divertidas. Con la presente crisis económica en los EEUU, las familias sienten que deben hacer menos compras y reconsiderar a quién comprarle regalos. Al intentar balancear sus presupuestos, muchos están decidiendo quedarse en casa en lugar de visitar a parientes que viven lejos. Éstas son decisiones difíciles, mas en lugar de permitir que le causen estrés, enfóquese en lo que usted puede hacer para traer gozo a su vida y a las vidas de aquellos a quienes ama.

Reduzca su Estrés

  • Si está haciendo demasiado, convoque una junta familiar para decidir qué es lo más importante. Tomen tiempo para escuchar las perspectivas de los demás.
  • Duerma suficiente, y aparte tiempo para relajarse, aún cuando esté muy ocupado. Toque música, lea un libro, hable con amistades.
  • Ejercítese y coma bien.
  • Maneje su estrés de maneras sanas en lugar de tomar demasiado, fumar, usar drogas, o comer de más. Estas maneras de manejar el estrés tienen consecuencias negativas.
  • Cuando se sienta alterado, tome varias respiraciones profundas antes de responderle a sus niños. Si está a punto de gritarles, excúsese hasta calmarse. Discipline con respeto.
  • Señale frecuentemente lo que aprecia de los miembros de su familia.

Reflexione sobre sus Valores

Al celebrar la temporada festiva, pregúntese si le está enseñando a sus niños los valores que usted considera importantes para vivir una vida con significado.

No es fácil enseñar a los niños que no siempre pueden tener todo lo que quieren, o lo que tienen sus amistades. Hay muchas influencias que asocian las navidades con el consumismo, y está en sus manos ofrecer un punto de vista más significativo.

  • Pase tiempo en la naturaleza, y enséñele a sus hijos a expresar su creatividad haciendo regalos para los demás.
  • Apague la TV y jueguen juegos en familia. El tiempo compartido es el mejor regalo que puede darle a sus hijos, y el divertirse y reírse es bueno para su corazón y para su salud.
  • Haga un plan sobre cómo va a compartirse con otros durante las Navidades. Tal vez servirá comida en el refugio, u horneará galletas para la vecina anciana.
  • Enseñe por medio de su ejemplo y señale lo bueno en las personas. El buen humor es contagioso.
  • Disfrute el tiempo que pasan en familia. Un buen regalo que puede proveerle a sus hijos es un hogar en armonía y el aroma de cocidos sanos en la estufa.

Esta temporada festiva, cuente sus bendiciones, conéctese con su comunidad, y comparta tiempo con las personas a quienes usted ama.

Estrés: Cuerpos y Mentes Sanos

Marisol Muñoz-Kiehne, PhD

La vida moderna precipita reacciones de estrés.  Sentimos que nunca hay suficiente tiempo, dinero, o ayuda.  A diario nos sentimos bombardeados por presiones y problemas; a veces nos vemos afectados por traumas y tragedias.

Las guías a continuación nos ayudarán a manejar el estrés al fomentar cuerpos y mentes sanos, listos para enfrentar los retos diarios de la convivencia en familia y sociedad.

  • Hacer actividad física diariamente
  • Dar y recibir masajes
  • Tomar baños calientes
  • Comer saludablemente (desayunar, hacer tres o más comidas diarias, dieta balanceada, porciones moderadas, evitar las gaseosas)
  • Evitar la auto-medicación con nicotina, alcohol, u otras sustancias
  • Desarrollar rasgos de personalidad que ayudan a lidiar con el estrés (optimismo, sentido del humor, flexibilidad)
  • Manejar las emociones de maneras seguras y constructivas (reconocer nuestras emociones y sus antecedentes, buscar desahogos, respetar nuestros límites)
  • Tomar descansos frecuentemente, en lugares tranquilos y seguros (apagar el teléfono o usar tapones en los oídos cuando va a descansar)
  • Pasar tiempo a solas regularmente, crear ratos de silencio, privacidad, introspección
  • Escribir en un diario (clarifica pensamientos y sentimientos, ayuda a tomar decisiones)

He aquí algunas técnicas simples, económicas, y efectivas que ayudan a prevenir y aliviar los problemas físicos y emocionales precipitados por el estrés.

  • Respirar lenta y profundamente desde el abdomen (a lo largo del día)
  • Relajar los músculos (tensar y relajar grupos de músculos en secuencia)
  • Visualizar (incluyendo todos los sentidos, crear imágenes mentales de bienestar y logros pasados o futuros)
  • Meditación (calmar el cuerpo y la mente mientras nos concentramos en la respiración, o en una palabra, frase o imagen)

Los pasatiempos son antídotos para los males causados por el estrés.

  • Ver y participar en deportes
  • Tocar y escuchar música, bailar
  • Admirar y crear obras de arte
  • Dedicar tiempo a sus intereses (jardinería, manualidades, mecánica, cocina)
  • Leer, y ver programas y películas con temas relajantes, constructivos e inspiradores
  • Cambiar de ambiente saliendo a pasear frecuentemente
  • Ponernos en contacto con la naturaleza

También ayuda el rodearnos de personas y mascotas calmantes, ¡y evitar aquellas que tienden a provocarnos estrés!

Libros

  • 52 maneras de reducir el estrés en su vida (Connie Neal)
  • Aprovechando el Estrés Para Triunfar: Claves Para Vivir Mejor (Luis Gaviria)
  • ¡Ayúdenme, siento estrés! (Joyce Meyer)
  • Cómo combatir la tensión y el estrés (Rojas Santiago)
  • Los 7 pasos para ser más feliz: Cómo liberarte del estrés, las preocupaciones y las angustias del pasado (Isabel Gómez-Bassols)
  • Mindfulness para reducir el estrés: Una guía práctica (Bob Stahl, Elisha Goldstein, Saki Santorelli y Jon Kabat-Zinn)
  • Primeros auxilios para el estrés (Miriam M. Pascual PhD, Jorge A. Lage PhD)
  • Simplifica tu vida con los niños: 100 maneras de hacer más fácil y divertida la vida familiar (Elaine St. James)
  • Sin estrés de una vez: 10 estrategias para obtener salud y felicidad en su vida (Frederic Luskin y Ken Pelletier)
  • Supera el estrés: Cómo reducir la ansiedad y vencer el cansancio (Rose Marie Gionta Alfieri)
  • Supera la ansiedad y el estrés de tu vida diaria (Javier Schlatter Navarro)
  • Uso eficaz del tiempo: Cómo alcanzar el éxito sin estrés (José María Acosta Vera)

 

Estrés: Atención, Apoyo y Ayuda

Marisol Muñoz-Kiehne, PhD

Ante el estrés personal, familiar y laboral…

Prestemos Atención

  • Evitar, minimizar, prevenir, o anticipar situaciones estresantes cuando sea posible
  • Estar alerta a sus propias señales y manifestaciones (físicas, emocionales y conductuales) de estrés, y a las de sus seres queridos, incluso sus niños
  • Determinar qué puede cambiarse y qué no (Si tu mal no tiene cura, ¿por qué te apuras? Y si la tiene, ¿por qué te apuras?)
  • Establecer qué es más importante (Primero, lo primero)
  • Definir cuán serio es el problema (No ahogarnos en un vaso de agua)
  • Decidir si es su problema o no (No paguemos intereses por una deuda que no hemos incurrido)

Busquemos apoyo informal

  • Rodearnos de personas calmadas
    • ofrecen buenos ejemplos del manejo del estrés
  • Hablar de nuestros problemas con personas de confianza
    • desahogarnos
  • Crear una red de sostén entre familiares y amistades
    • platicar a menudo, compartir preocupaciones, ofrecer y pedir ayuda práctica y emocional
  • Alternar con otras familias
    • cuidado de niños, transportación, mandados
  • Buscar recursos en la comunidad
    • grupos de apoyo, programas educativos y recreativos
  • Utilizar los programas para padres de familia que ofrecen las escuelas e Iglesias

Procuremos ayuda profesional

  • Consultar profesionales
    • ofrecen conocimientos, orientación, sugerencias
  • Usar los servicios de agencias sociales
    • trabajadores sociales, ayudantes
  • Usar los servicios de agencias de salud mental y consejería
    • psicólogos, terapeutas
  • Usar los servicios de agencias de salud
    • médicos, asistentes de médicos, enfermeros
  • Aprender sobre las destrezas del criar niños
    • a través de clases, grupos, consultas particulares, y materiales educativos
  • Aprender sobre destrezas de comunicación, manejo del tiempo, manejo de la ira, manejo del estrés, etc.
    • a través de clases, grupos, consultas particulares, y materiales educativos
  • Usar las líneas telefónicas calientes (de crisis) o tibias cuando necesite apoyo, respiro, o guía

 

Enojo

Marisol Muñoz-Kiehne, PhD

¿Qué es el enojo (ira)?

  • Reacción emocional natural que todos sentimos
  • La emoción es natural, innata
  • Las maneras en que la expresamos son aprendidas
  • Todos tenemos el derecho de sentir enojo
  • Todos somos responsables de cómo lo manejamos y expresamos

El enojo como reacción física

  • Adrenalina y otros químicos entran al flujo sanguíneo
  • Corazón bombea más rápido
  • Presión sanguínea sube
  • Músculos se tensan

Precipitantes del enojo

  • Varían de persona a persona y de situación en situación
  • Estrés (de la familia, trabajo, salud, finanzas)
  • Frustración (cosas fuera de nuestro control)
  • Temor (amenaza de violencia o abuso verbal o físico)
  • Sentimientos heridos (resentimiento por rechazo u ofensa)
  • Injusticia
  • Desilusión (cuando nuestras expectativas no se cumplen)
  • Crítica

Beneficios del enojo

  • Nos da energía y fuerza en emergencias
  • Nos ayuda a movilizar cambios positivos (motivación a seguir adelante)
  • Nos conduce a hablar, y hablando se resuelven problemas
  • Nos da señal de que hay problema, peligro, conflict

Peligros con el enojo

  • Cuando muy intenso
  • Cuando muy frecuente
  • Cuando persistente
  • Cuando lleva a la impulsividad
  • Cuando lleva a la violencia
  • Cuando es ignorado o expresado inapropiadamente, hace daño a uno mismo y a los demás
  • Causa o complica problemas de salud (alta presión, problemas del corazón, dolores de cabeza, dolores de estómago, problemas de la piel, estreñimiento o diarrea, problemas al dormir)
  • Ocasiona accidentes por estar distraído, problemas de concentración
  • Puede guiarnos a tomar decisiones erradas, por nublarnos el juicio
  • Se manifiesta como tensión y ansiedad
  • Conlleva a desarrollar baja auto-estima, por sentirnos fuera de control
  • Puede precipitar depresión, al reprimir nuestros sentimientos
  • Precipita o complica problemas interpersonales, sobre todo si hay sarcasmo, hostilidad y críticas

El enojo fuera de control

  • Crimen (asalto, destrucción de objetos, asesinato)
  • Abuso (físico, sexual y emocional, gritos, insultos) a seres queridos o desconocidos
  • Problemas en el trabajo
  • Abuso de alcohol o drogas (para tratar de calmar o ahogar la pena, u olvidar los problemas)

Pasos

  • Pare- Reconocer el enojo por sus señales
  • Despacio- Identificar los precipitantes
  • Adelante- Decidir qué hacer

Evitar

  • Tomar el asunto personalmente
  • Ignorar el asunto y esconder sus sentimientos
  • Llevar cuentas, rencores
  • Mantener el enojo embotellado
  • Culpar a otros por nuestro enojo
  • Usar alcohol o drogas para lidiar con nuestro enojo
  • Manifestar el enojo mediante conductas agresivas

Intentar

  • Hacer un alto
  • Retirarse de la situación
  • Contar hasta que se calme
  • Respirar profundamente
  • Cantar
  • Gritar donde no le oigan
  • Calmarse antes de hablar
  • Expresarse clara y firmemente
  • Orar
  • Tomar agua
  • Tomar ducha o baño tibio
  • Llorar, desahogarse
  • Buscar ayuda
  • Usar el sentido del humor
  • Actividad física, ejercicio, deporte
  • Relajamiento muscular y descanso
  • Pasatiempos
  • Escribir una carta, o notas en un diario
  • Escuchar música
  • Pegarle a algo no peligroso
  • Dejar pasar, escoger qué batalla pelear
  • Perdonar

Cuando otros expresan enojo

  • No responder con más enojo (no echarle gasolina al fuego)
  • No tomarlo personalmente
  • Escuchar atentamente
  • Tomar precauciones

Cuando sus hijos expresan enojo

  • Sea un buen ejemplo manejando su propio enojo
  • Escúcheles
  • No usar castigo físico
  • Decida si es enojo normal o un problema que necesita ayuda profesional

 

Depresión Post-Parto

Marisol Muñoz-Kiehne, PhD

Aún cuando el embarazo haya sido planificado y deseado, el parto haya progresado normalmente, y tanto el bebé como la mamá se encuentren sanos, es común que ésta experimente altibajas emocionales después del alumbramiento.

Además de la alegría y los temores de esperarse, la mayoría (75-90%) de las nuevas madres experimentan desánimo y sentimentalismo, una depresión leve también llamada “Baby blues”.  Ésta se alivia con descanso y apoyo, y tiende a durar apenas unos días.

La depresión post-parto afecta a un 15% de las madres.  Es una condición más severa y persistente, la cual requiere evaluación y tratamiento médico y sicológico.

Síntomas

  • Tristeza, llanto, sentimientos de culpa  
  • Apatía, pérdida de interés en actividades placenteras
  • Ansiedad, inquietud, desesperación
  • Irritabilidad persistente
  • Insomnio o letargo
  • Cambios en el apetito
  • Problemas de concentración, memoria, toma de decisiones
  • Rechazo, pensamientos o impulsos agresivos hacia el bebé
  • Desesperanza y pensamientos o impulsos suicidas
  • Síntomas sicóticos, tales como delirios y alucinaciones

Causas

  • Cambios hormonales rápidos y dramáticos (estrógeno, progesterona, cortisol)
  • Baja en endorfinas tras el parto
  • Malestares físicos relacionados con el trabajo del parto o la cesárea
  • Agotamiento por falta de descanso y sueño
  • Agobio por las responsabilidades y tareas del cuidado del bebé

Efectos

La depresión post-parto tiene repercusiones serias en la vida de la mamá y del bebé. La madre puede ver afectadas sus relaciones y su sentido de amor propio, hasta el punto de desear morir y hacer intentos suicidas.  En busca de alivio para el malestar de la depresión, puede recurrir al alcohol y a las drogas.  Esta enfermedad puede dar pie a tragedias si la mamá sucumbe a impulsos suicidas o agresivos.

Aunque no llegue a tales extremos, la madre deprimida no es capaz de satisfacer cabalmente las necesidades del bebé; no le habla, canta y juega como éste necesita.  El que la mamá no responda a las señales básicas del recién nacido, tales como el balbuceo y el llanto, puede propiciar en éste trastornos emocionales.  Estudios recientes señalan que la depresión de la madre está relacionada a retrasos en el desarrollo del lenguaje, del aprendizaje, y a problemas de comportamiento en el bebé.

Tratamientos

Afortunadamente, tenemos a nuestro alcance tratamientos contra la depresión post-parto.  Éstos deben procurarse lo antes posible, para minimizar el sufrimiento de la madre y los impactos negativos en el bebé.

  • Evaluación y tratamiento médico (terapia hormonal)
  • Medicamentos antidepresivos
  • Psicoterapia o consejería individual, de pareja, o familiar
  • Terapia de grupo o grupos de apoyo con otras mamás
  • Consulte a su médico o clínica de maternidad

La depresión post-parto es angustiante y peligrosa.  Mas hay ayuda y hay cura.